03 febrero 2005

Soltar lastre

De vez en cuando me da un ataque de "lastritis". Es una enfermedad que se va incubando lentamente y de pronto ataca sin piedad. Me empiezan a picar las manos y me sube por los brazos un deseo irrefrenable de ponerlos en disposición de tirar a la basura un millón de cosas. Algunas de esas cosas llevo años odiándolas y las conservo por si acaso se presenta en casa la persona que me las regaló en un día particularmente aciago. Otras, son recientes pero se me ha olvidado para que las compré o si no lo hice yo, como han llegado hasta mi casa; otras han perdido su utilidad y otras están ya aburridas de existir. Y ya no puedo aguantar más y comienzo una búsqueda concienzuda por armarios, cajones, altillos, estanterías, arcones y cualquier otro lugar susceptible de contener algo de lo que pueda deshacerme de inmediato. En menos tiempo de lo que tardo en contar hasta cien ya he logrado llenar unas cuantas bolsas que irán a parar al contenedor en cuanto estén cerradas para no caer en la tentación de volver a guardar algunas. Y cuando, por fin, las he perdido de vista para siempre sé que las echaré de menos aunque ya no tuvieran ninguna utilidad pero me siento mucho más ligera y libre.
Hay lastres más difíciles de soltar. Lastres que nos atan el alma a sentimientos que ya no necesitamos. Enfados que ya hemos olvidado porqué surgieron, rencores que nos impiden sonreír al prójimo, enfrentamientos por causas estúpidas que nos alejaron de algún amigo, daños colaterales de guerras que no eran nuestras o batallas que perdimos justamente y no queremos reconocer. Las personas nos hundimos bajo el peso del orgullo, la soberbia, la vanidad, la prepotencia, el victimismo y mil otras causas que conocemos de sobra aunque no queramos admitirlo.
¿Porqué no empezar, ahora mismo, a soltar lastre emocional? Empezando por lo que más lugar ocupa en el alma.

3 comentarios:

Ismael de Andrea dijo...

Hola Trenzas!!

Estoy modificando el diseño del Blog... creo que ahora podes entrar. Pero falta un par de cosas.

Besos,

Is.

Patsy dijo...

Upppssss hoy me diste para pensar!!!

Reflexionaré sobre esas lastras emocionales que tanto daño me hacen y así como me deshago de las lastras materiales, intentaré hacerlo de éstas (nunca lo había pensado de esa manera).

Cuidate :-)

Anónimo dijo...

Si, vale, pero... la gran pegunta es... ¿¿cómo consigo soltar ese lastreee?? ¿Cómo soltar rencores que aún nos duelen, cómo hacer que ya no duelan?