30 enero 2007

Charlando con Teresa

De lunes a viernes, dos horas cada día, estoy con Teresa. En mayo cumplirá 90 años. Mide algo más de 1.30 y pesará unos 38 kilos. Lleva un audífono anticuado, usa gafas solo para coser y a pesar de arrastrar bastante la pierna derecha, camina a una velocidad considerable, por no mencionar que vive en un segundo piso sin ascensor y que hay unos cuarenta escalones que subir, cosa que hace al menos una vez al día. Tiene una carita de duende travieso; arrugada como una pasa, la piel oscura, quemada por una niñez y juventud trabajando en el campo, cuidando cabras y aventando trigo, y unas manos fuertes con las que expresa todo lo que no acaba de poder decir con las palabras.
Una vida tan larga, da para mucho escuchar y yo la escucho y aprendo. Hoy hemos hecho jabón. Solo en el recuerdo, claro. Me ha contado cómo se iba guardando cada gota de aceite sobrante y cada trozo de tocino o grasa que no se pudiera comer. Cuando juzgaban que había suficiente se iba al pueblo a comprar sosa. Se encendía un fuego en el corral o en el campo, se ponía encima un enorme caldero, se fundía la grasa, se añadía la sosa y con un palo largo, se removía la pasta constantemente hasta que estuviera a punto. Entonces, se vertía en unos cajones de madera y se dejaba secar. Después se volcaba y se cortaba en trozos del tamaño adecuado.
Pero Teresa no lo cuenta así. Ella se levanta de la silla y se coloca; toma el imaginario palo y da vueltas y vueltas a la inexistente pasta que hierve en el inexistente caldero.
Incluso se ajusta la ropa al cuerpo para que el fuego no la alcance. Se mete en la faena con una viveza y una precisión que te hacen ver lo que ella veía y hacía. Notas hasta el olor de la pasta jabonosa en el aire del comedor. Y cuando el jabón está hecho, seco, cortado y almacenado, se sienta, se lleva las dos manos a la frente y dice: "¡lo que yo habré trabajado..! ¿Cómo estaré viva yo?" Y apreta los labios y mueve la cabeza arriba y abajo y luego de un lado a otro, como si a la vez aceptara y negara el hecho de estar a punto de cumplir 90 años.
Todos los días vigila desde la ventana mi llegada. Cuando me ve aparecer, corre a abrir la puerta y prácticamente, se me echa encima con alguna noticia espeluznante que ha oído o visto en la tele.
-¡Oye...! ¿Tú sabes eso que ha pasado?
-Pues..., no. ¿Qué ha pasado?
-¡Oh.., oh.., cosa tremenda...! ¡Más de cien muertos...!
-¿Dónde?
-Aquí, en un pueblo cerca. ¡Oye, una cosa tremenda, tremenda...!
Y apreta los labios y mueve la cabeza y se va tan rápido como puede al comedor a poner la tele.
-Ven, ven, que ahora lo dicen . ¡Mira, mira...!
La tele muestra unas imágenes del último atentado en Irak.
-Teresa, tranquila. Esto no ha pasado en España, ni cerca.
-¿Ni en Canarias..?
-No, en Canarias tampoco. No se preocupe que su familia está bien. Esto ha sido muy lejos.
-¡Ahhhhhh....! ¡Pobretes...!
Y una sonrisa le aparece en la boca y los ojos le brillan alegres. Su familia está a salvo. Ya puede asomarse otra vez a la ventana a controlar las obras de la calle o relajarse para los ejercicios que haremos a continuación.
Hoy también me ha dicho que esas obras del Ayuntamiento costarán 25 millones de "ebros" y ante la magnitud de la cantidad me ha preguntado si yo sabía cuánto era eso en billetes de cinco.
Es decir, cuántos billetes de cinco euros entran en 25 millones.
Hubiera necesitado a mi amiga Fractal para cual para que me sacara del apuro, pero como no estaba, he tenido que decirle que no tenía ni idea, pero seguro que más de cien. Ante tamaña cifra, se ha llevado las manos a la frente, se ha mordido los labios y ha vuelto a agitar la cabeza en todas direcciones, al tiempo que exclamaba: "¡Qué barbaridad..! ¡Más de cien billetes de cinco...!"
*
The Seasons Op.37a, No.6 'June' de Piotr Ilich Tchaikoski. 3.74 megas. Formato .wma

31 comentarios:

Anónimo dijo...

Gracias.
Gracias por contarlo
Gracias por compartir.
Gracias por hacerme sonreir.
Gracias por hacerme llorar.
... ¿Cómo se puede coser a los 90 años? yo que necesito enhebrar las agujas cerca de la ventana...

Un gran abrazo, amiga.

Anónimo dijo...

Me recordó mucho a una vecina que falleció el año pasado de alzheimer, era de Canarias. La mejor vecina que tuvimos.
Mi madre se llama Teresä.
Un beso. Lindo post.

Anónimo dijo...

qué maravilla.........
tal como lo cuentas, y tal como sois tú y esta señora, me llega el olor del jabón en sus manos arrugadas y fuertes.

me parece que mientras tú vayas a verla, esta mujer no morirá nunca. ¡por eso es tan vieja!

bueno, seguro que sí se morirá algún día, porque la muerte se lo lleva todo, sin contemplaciones. pero con tus palabras y los sentimientos que provocas, teniéndote cerca, por lo menos se irá feliz.

eres preciosa, trenzas

Anónimo dijo...

Sí, eres preciosa Trenzas, estoy mucho muy de acuerdo con Iruna. Es una historia fantástica la que nos has regalado ahora, sabes evocar los sentimientos más tiernos y más humanos a través de tus palabras, y lo más sorprendente es que tus palabras reflejan tu forma de vida.

Sí, eres preciosa Trenzas.

Salú.

P.D. Anda, no seas malita sólo conmigo, deja tu enojo y acéptame la excusa de que aquello era sorpresa para quien pasara por mis lares. Acéptame también el fuerte abrazo que te envío, los topetones cariñosos para la cabra, los ronroneos para los gatos y para ti, los trinos para todos los voladores de la casa.

.

Carolina.Mosso dijo...

Te echaba tanto de menos, amiga.
Me lo llevaba, como Teresa, esperando que volvieras.

Gracias por compartir algo tan íntimo y hermoso.

Un abrazo grande,
C.

yole dijo...

Me has recordado a mi madre...y decirte que ¡eres un cielo1 es demasiado pocooooooooo. Tu dedicación a esas personas es abrazable.
Besos agradecidos.

Anónimo dijo...

Buenos días Jamie Lee, hermosa la historia que nos traes, lo curioso es que todos tenemos al alcance historias como esta, sólo nos falta saber contarlas, como lo hace mi querida Trenzas.
Un Mosqueperro

Pinceladas de mi dijo...

Es precioso! Jo... lo has descrito tan bien como ella te lo ha contado, seguro, porque yo la estaba viendo, y te estaba viendo a ti :), es una crónica preciosa de verdad, me ha emocionado un montón. Esto me hace recordar las tardes que paso en el geriátrico en que trabaja mama, jeje me encanta hablar con las señoras que tienen demencia, porque viven en un mundo totalmente distinto, más de una vez me han mandado a comprar pan a la cocina o me han dicho que estaban embarazadas y que su novio iba a venir a por ellas... jejeje que vida esta. Bueno me voy a sacarle brillo a los codos un besote muy grande de las (ahora) 3, para (de momento) las 2, como crecemos en número... al final 2 podremos ser 1000 :)

PD muy bonita la canción aunque es una pena que no se pueda escuchar entera, otro besote muy grande

Pinceladas de mi dijo...

ya escuché la canción, y ahora me gusta más :)

pila besiiisnos para ti y para Ágata, y que tengas un buen día, a mis amigas para que se rían les toco el rin rin, ya se que no es una palabra muy anatómica pero creo que es el más común conocido como ombligo, :), y digo -rin rin, hay alguíen, entonces más que reirse de la gracia se ríen de mi jejeje

Lucy in the sky with diamonds dijo...

Muy linda la historia.
Primera vez que entro a tu blog y estoy viendo un poco de qué va.
Me gusta.
Saludos
LSD.-

BETTINA PERRONI dijo...

Ayyyy... yo he estado a punto de llorar... haces bien en escuchar la porque asus 90 años ella está viva en vida... ya la quiero mucho! te lo juro jiji... dale todos mis saludos, dile que tiene una admiradora en México y que siento una pena no estar cerca para yo también sentarme a su lado y escucharla cuantas veces sea necesario.

Gracias :D.... dale besos de mi parte!

Vert dijo...

Que bonita historia. Y que bien la contaste.
Me has recordado que yo escribí una semejante sobre mi tía. Y hoy es un buen día para buscarla porque la semana pasada murió su gran amiga y está muy triste. Buscaré ese texto.
Gracias mininia!
pesto.nets

Zifnab dijo...

La mujer tiene una buena discípula

Me gustan los viejos. Si algún día publico un libro de cuentos (o lo intento) el primero ya tiene nombre, Cuentos de viejas. Y lo protas serán ellos.

Por eso te juro que lo has contado muy bien.

Porque me han dado ganas de escribirlo esta noche

Se feliz

Patricia dijo...

este es uno de esos post que conmueven hasta bel alma y que desearia guardar y copiar para leer de vez en cuando. Me encantaria conocer a teresa. Aun vive porque seguramente tendra mil cosas que contar aun y espero de vez en cuando nos las sigas contando.

Un abrazo y excelente post!!

cieloazzul dijo...

que ternura trenzas...
que experiencia!!
que linda manera de trascender....
muchos besos !!!

Anónimo dijo...

Ya le contarás a Teresa que gracias a ella y a ti hemos pasado un momento delicioso

fractal dijo...

Estas presencias y estos relatos nos retornan la fe en el ser humano.

Nosotros hacemos jabón en casa, tal como lo has contado. Los niños se divierten haciéndolo. Oye Trenzas, ¿podrías hacernos un favor? Pregúntale a tu amiga Teresa como hacía ella para darle aroma al jabón. Es que no sabemos cuando, o qué, hay que poner para conseguir que huela bien. Hemos probado a añadirle hierbas y pieles de fruta, pero ni te cuento el asqueroso resultado que obtuvimos. Visto el desastre, nos quedamos con el jabón neutro a secas. Ah, oye, !cómo limpia este jabón! Es perfecto. Y pensar que es grasa de frituras...

Besos, amiga trenzas.

(Ah, soy muy mala calculando... jeje. Gracias por el recuerdo)

Trenzas dijo...

Arare; pues más de una vez la he visto enhebrar las agujas y coser hasta sin las gafas :) También me río y me emociono con ella. Lo que cuenta, daría para más de un libro. Y supongo que lo que no cuenta, para una docena, al menos :)
Molts petonets, amiga.
*
Robertö; ella no es de Canarias, aunque vive allí su hija. Por eso su preocupación :)
Personas así, no se olvidan ¿verdad?
Siempre se echan de menos.
Un beso grande, amigo.
*
Iruna; te aseguro que si mis cuidados pudieran hacer que viviera para siempre, lo haría sin dudar. Nunca se queja y aunque le ha tocado pasar mucho y malo, agradece cada amanecer, cada palabra, cada sonrisa y se siente feliz con lo poquísimo que tiene. Es una permanente lección de humildad y de alegría de vivir.
Soy yo quien tiene que estar agradecida por haberla encontrado.
Molts petons, Iruneta.
*
Julio; me gustaría poder contar historias así de todos "mis" abuelitos. Por desgracia, no es posible. Son muchos más los que nunca llegan a saber quién soy, ni pueden contarme quién eran. Y los que, aún habiendo llegado a conocernos, se van perdiendo en el olvido de todo.
Ley de vida, pero terriblemente injusta y dolorosa.
Ya se me ha pasado :) No puedo enfadarme contigo, pero reconoce que he estado un año yendo a verte y nada. Y dejo de hacerlo por el trabajo de las Fiestas y tal y vas y escribes :(
Como quiera que sea, contentísima de leerte, ya lo sabes.
Besos y demás expresiones afectuosas de los habitantes de casa Trenzas :)
*
Carolina; pues ya regresé; como tú, que ya he visto nuevos posts en tu blog :)
Supongo que algún recuerdo te ha traído. Dulce, espero, porque así es como debemos recordar.
Un abrazo enorme para tí, amiga
*
Yole; recordar es vivir y hacer que vivan las personas que amamos. Tengo suerte de poder hacer un trabajo que me entusiasma, aunque también produce mucho dolor ver irse a tantos.
Eso que decía; ley de vida :(
Una docena de besos, peluquero
*
Mosqueperro-Luzbel y otros; cierto; todos podríamos contar historias así de nuestros mayores. No escuchamos lo bastante o tal vez sólo es que no nos fijamos hasta que nos faltan. El mérito es de Teresa; yo solo transcribo :)
Besos a todos los heterónimos
*
Pinceladas de mi; ¡ah, sí..! Tenía una paciente que siempre estaba preocupada porque ya eran más de las 9 y su madre la iba a reñir cuando llegara a casa. Cada ruido la ponía en tensión. Creía que era la carreta que tenía que llevarla al pueblo a tiempo.
Otro, siempre miraba por la ventana esperando ver llegar a las cigüeñas.
¿Qué haré yo, si llego a esa edad y a ese estado? :)
Me alegro de que te haya gustado la música. Ponla para "hacer codos" que es relajante :DDD
Pila besinos a todas :)
*
Lucy Bienvenida al blog. ¿Te he visto en casa de Robertö, verdad?
Me alegro de tu visita y de que te vaya gustando esto. Te debo visita.
:)
Un abrazo
*
Bettina; mejor le digo que vives aquí al lado, porque si tengo que explicarle donde queda México, tal vez me lleve demasiado tiempo :)
Te encantaría, estoy segura. Además de hablar, se pone tan en situación que vives lo que cuenta, no sólo lo escuchas :)
Un abrazo enorme para ti, preciosa
*
Vert! ¡y dejanosla leer, por favor..! Es duro cuando muere un amigo, y si eres mayor y ves que ya hay muchas sillas vacías alrededor, es peor aún. La evidencia se vuelve cruel.
Besos a tu tía y ánimos.
Petons i pesto.nets
*
Zifnab;¡pues a ello, mago...!
Ya es hora de que los viejos reciban su ración de protagonismo, que bien merecida la tienen.
Son mucho más que un negocio para las agencias de viajes o las residencias. Y muchísimo más que un estorbo para según qué familias.
Vale; que si sigo por este camino, me mosqueo rápido :)
Un beso grande, sensible mago.
*
Patricia; Bienvenida al blog. Me alegra que te haya gustado Teresa. Espero que aún viva mucho para traerla de vez en cuando a protagonizar alguna historia que me cuente. Ya me ha contado muchas, pero aún queda, que es una larga vida la suya.
Un abrazo para ti tambien.
*
Cieloazzul; ya os digo que el mérito es de Teresa. Si ella no fuera como es, yo no habría podido contarlo; ni bien ni mal :)
Pero sí es tierna, y cueta imaginar como ha logrado conservar esa ternura a lo largo de una vida tan dura y dilatada.
Un beso enorme, preciosa
*
Manel; se lo contaré como si fuera un cuento para niños: "Había una vez, en un lejano país, una viejecita llamada Teresa, y sucedió que..."
:)
Un abrazo, amigo
*
Fractal; se lo pregunto el lunes sin falta. Aunque no sé si en aquel tiempo se planteaban que el jabón oliera a otra cosa que a jabón :)
Cierto que limpia estupendamente. Cada año, le traen de su pueblo y cada día lava su ropa interior con él. Sí, sí. Pasando de lavadora, que tiene, pero solo para que la chica de la limpieza lave las cosas grandes. Lo pequeño, ella, a diario. ¡Es ver para creer..!
¿Así que tampoco sabes cuantos billetes de 5 "ebros" entran en 25 millones...?
¡Mecachis...!
:)
Abrazos y cariños
******
Si me olvido de alguien, ha sido sin querer.
:)

Daniela dijo...

es una maravillosa oportunidad de compartir con personas mayores y que nos regalan no solo su mirada llena de historia............. sus sentimientos que por alli han calado la vida
slds desde Santiago de Chile

MentesSueltas dijo...

Gracias por compartir esta historia que nos llega tan profundo.
Gracias.
Un abrazo.
MentesSueltas

Llanos dijo...

Amiga trenzas: Muchas gracias por compartir esta historia con nosotros. ¡Cuánta ternura desprende (desprendes)!

Yo, a mis treinta y doce, hace años que no enhebro una aguja sin ayuda de esos "ayudadores para enhebrar agujas". Mi precoz presbicia hace que ni con mis gafas "progresistas" (como las llama alguien) pueda hacer determinadas cosas. Señor...

Un besote GRANDE.

Sahndrah dijo...

Es increíble que últimamente varias son las cosas que ma han hecho retroceder en el tiempo y recordar a mi bisabuela (sí,sí,la conocí y disfruté de su compañía durante muchos años)...este post es una de ellas, me he acordado de cuando me quedaba con ella y me contaba historias maravillosas de su vida...te dejo,me viene la lágrima tonta cuando la sombra de Peter Pan me susurra que esos tiempos no volverán. Precioso post.

La Pitonisa dijo...

TRENZAS
COMO QUE TUS POSTS SON ULTIMAMENTE UNA LECCION DE VIDA...
ME HICISTE IRME CON LA TORRE CONTIGO Y TU AMIGA TERESA,,,
ME HABRIA GUSTADO TENER UNA ABUELITA ASI...
BESOS Y SALUDOS

Trenzas dijo...

Daniela; ¡y que pena que a veces se nos pasa la oportunidad.! Siempre andamos con prisas y son pocas las ocasiones que tenemos para escuchar. Yo tengo suerte: es mi trabajo :)
Un beso fuerte, amiga
*
Mentes Sueltas; antes que nada, gracias a ti por pasarte poe el blog :)
Cierto que estas historias tocan. Todos tenemos algún abuelo como punto de referencia. Teresa nos los recuerda.
Un abrazo, amigo
*
Llanos; ¿conque ayudadores para enhebrar agujas, eh? :DDD
Deberías patentar el nombre, antes de que algún espabilado te quite los derechos :)
Y bueno, tú DEBES llevar gafas progesistas ¡qué menos..!
No siempre puedo tener una relación así con un abuelo/a. Cuando se da, la disfruto de verdad.
Un abrazo bien grande
*
Sahndrah; ¡qué suerte...! Una de las mías, sí llegó a conocerme, pero yo a ella, no :(
Siempre tengo en mente a mis abuelas naturales, sobre todo a una de ellas. Y siempre digo, "como decía mi abuela" o "mi abuela hacía..."
Y es que se las encuentra a faltar más a medida que pasa el tiempo. O vas viendo cuánta razón tenían cuando hablaban :)
Un beso, amiga
*
La Pitonisa; ¿viniste con Torre de Babel y todo...? :DDD
Se lo contaré a Teresa, porque ella habla de eso alguna vez. Dice que la calle, con tanto extranjero, parece eso mismo; una Torre de Babel.
Besos y abrazos grandes, preciosa.

Isabel Barceló Chico dijo...

Maravillosa Teresa. Deberíamos prestar más atención a las personas ancianas y darnos cuenta de lo mucho, muchísimo que nos pueden enseñar de al vida, incluso cuando ignoran cosas del presente. Llamar "ebros" a los euros es toda una lección.
¿Te animas a ser un personaje en la historia de Dido, e incorporar también a Teresa (con otros nombres, claro)? Si es así, déjamelo en un comentario en mi blog. Besos.

Daniela dijo...

NUEVAMENTE PASO A SALUDAR!
ME ES GRATO SABER QUE SOMOS MUCHOS LOS QUE VALORAMOS LA OPORTUNIDAD DE CONVERSAR CON LOS ADULTOS

SLDS

Prada dijo...

creo que todos te han dicho mas o menos mi sentir, y a la vez se quedan cortos...

TU POST ES MEMORABLE!!!!

...creo que ella estaria feliz y orgullosa de saber que la nombras.

esas personas me dan sentimientos encontrados. respeto, y unas ganas de achucharlas!! mmmmmmmmmhhh!

mandala un besazo!!

y cuidate tu! que

Trenzas dijo...

Isabel Romana; muy cierto, amiga. Son la memoria viva de tiempos que no hemos conocido y que deberíamos conocer para apreciar, o no, lo que ahora tenemos.
Te digo algo, en cuanto em aclare un poco con esto del cambio.
Gracias por proponerlo :)
Un abrazo, amiga
*
Daniela; ¡pues claro, amiga..! Quizá lo que ocurre es que no nos paramos a contarlo, pero seguro que todos tenemos lindas experiencias con los abuelos.
Un abrazo grande
*
Avrilis; muchas veecs he leído posts con recuerdos estupendos de los abuelos o de los padres o de algún pariente muy mayor, de quiens e guarda un recuerdo especial.
Si supiera que hablo aquí de ella, seguro se mordería los labios, se llevaría las manos a la frente y diría ¡Qué barbaridad...! ¡Yo saliendo en una pantalla como la tele...! :DDD
Un beso enorme, mami guapa..!

≈Gr¥§εL≈ dijo...

Di a teresa, que se le envian abrazos desde Mexico, y que los comparta contigo.

Osselin dijo...

Bonita entrada. Hay que querer a los mayores. Y conversar ocn ellos. Gracias por este regalo.

Millaray dijo...

Sabes mi niña ? me recordaste a la abuela María..esa... la del shu shu shu no te preocupes yo me entiendo es tan así como Teresa hace un tiempo que ya no está con nosotros pero siempre va a estar.
Tqmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmm y sigo subiendo(me estoy poniendo al día ;)