04 marzo 2005

¡Oh, querida...!

Reconozco que algunas situaciones me dejan tan descolocada que me cuesta salir del pasmo y racionalizarlas. Quizá os haya pasado lo mismo alguna vez.
Pongamos, por ejemplo, que...
Entras en un lugar concurrido, donde más o menos todo el mundo se conoce entre sí pero no todos son amigos o parientes. Una celebración familiar, amistosa o algo parecido. De pronto, alguien a quien no consigues ubicar en el panorama de los conocidos, se te acerca con grandes muestras de alegría y, en un tono que hace que todo el mundo se vuelva a mirar, te espeta; "¡Oh, querida, estás magnífica..! Me alegro tantísimo de verte! ¡Que preciosidad de vestido! ¿Cambiaste de peinado, cierto? Te queda genial, genial...!!! ¿Sabes? Nunca pensé que lograras salir de aquello tan desagradable y me alegro muchísimo.. !Uy, pero que bolso tan perfecto..! Estás divina, divina..!"
Y una quisiera que la tierra la tragase, porque apenas sabe quién es esa persona ni sabe a que asunto desagradable se refiere, ni siquiera se ha cambiado el corte de pelo. Intentas murmurar un saludo, decir algo, pero no es posible, porque la persona en cuestión ya está paseando la vista por el salón por si hay alguien más interesante que tú, mientras te quita del hombro un cabello o un hilito del vestido y arruga delicadamente la nariz sin parar de alabarte a voz en grito.
Y empiezas a sentirte muy mal y a pensar que deberías haberte cepillado bien la ropa o que quizá no te has puesto suficiente desodorante o peor aún, que estás sencillamente impresentable.
Por suerte, no sueles mantener su atención demasiado tiempo y de repente se aleja sin despedirse y corre en dirección a otro alguien tan indefenso como tú con su "!Oh, querida, estás magnífica... etc, etc"

4 comentarios:

Ismael de Andrea dijo...

JUAAA!!! qué buena descripción, Trenzas! Muchas veces me he encontrado con gente asi, con el tiempo cada vez que me las encontraba las adulaba de la misma manera... He disfrutado tanto de sus caras horrorizadas pensando que tal vez estaban impresentables.

Don_Tiresias dijo...

Por suerte no me he cruzado con muchas personas así. Sucede que tengo un temperamento irónico y sarcástico por naturaleza. Soy de la clase de persona a la que cuando alguien así le dice "saliste de algo desagradable", es capaz de responderle "he aprendido a sobreponerme , igual que vos, que lograste sobreponerte a los cuernos que tu marido te regala a diario", o cosas por el estilo( siempre con cara amistosa, por supuesto.

Como dice el chiste: Cada vez que hay algun casamiento en la familia, siempre me encontraba con alguna tía que me decía: "A ver vos cuando lo/a imitas".
Dejaron de decirme eso, cuando yo empecé a decir lo mismo en los funerales.

PD: La suscripción es sólo si queres escuchar la radio en vivo, pero para escuchar los segmentos de programa que ellos ponen en la página, no es necesario suscribirse. Sin embargo si es necesario tener alguno de los reproductores que ellos te dicen allí. Si podés trata de conseguir los anteriores libros de él "Crónicas del Angel Gris", "El libro del Fantasma", y la opereta "Lo que me costó el amor de Laura". Los tres son absolutamente recomendables.

Saludos

Sherezada dijo...

Jojojojojojooj. ¿Adivino si digo que te ha pasado recientemente?

A mí no me ha pasado mucho, por suerte!, pero pronto creo que empezarán con lo de "y cuándo la imitas" (refiriéndose a la novia); pues bien, desde ya empezaré a ensayar la respuesta que ha dado Don Tiresias.
Muajajajajaja

PD: sigo viva, y sin pasar vergüenzas con mi polerita. >:D
Sherezada

Don_Tiresias dijo...

La semana que viene se casa mi primo, asique ya veremos si me toca cruzarme con esta clase de gente, y si me toca sacar a relucir una vez más mi clásica respuesta para estas ocasiones.